BASKETZARAGOZA.NET Los pequeños amantes del baloncesto de Compañía de María han disfrutado esta tarde de una visita muy especial. Kevin Lisch y Rasko Katic han sido los encargados de impartir un divertido clínic en el céntrico colegio zaragozano ante el centenar y medio de niños congregados en la pista de la sección que dirige Elena Lahoz.
Acompañados por el director de las categorías base del CAI Zaragoza, Luis Arbalejo, y los técnicos de cantera Pedro Carrillo y Jorge Samper, los dos jugadores han podido gozar desde el primer momento de una cálida bienvenida. Durante la introducción de ambos, tiempo en el que algunos han aprovechado para poner en práctica su nivel de inglés, no ha sido raro ver algunos rostros boquiabiertos y otros, algunos de los más pequeños, intimidados por la imponente y titánica figura del pívot serbio.
Nada que sin embargo no pudiera remediarse con un balón de por medio. Separados ya en grupos tras las presentaciones comenzaba el turno de la acción. Primeros botes, primeras carreras y el objetivo de superar la exigente barrera física que representan ambos profesionales. Pese a ello, el ambiente distendido, los fundamentos y la ilusión hicieron el resto bajo la atenta mirada de los padres asistentes a tan especial sesión de entrenamiento.
Pero la cosa no acabó ahí. En un dos contra uno todo se ve mucho más fácil y los más atrevidos solicitaron la ayuda de Kevin y Rasko para conseguir ser capaces de meterla para abajo y ver el baloncesto desde otro punto de vista, el de los gigantes que superan los dos metros de altura. Con la actividad tocando a su fin llegó el momento para inmortalizar este entrenamiento tan especial y de recoger los obsequios y conseguir, fuera donde fuera, el autógrafo del base y el pívot rojillo.
Reportaje gráfico: Ramón Comet