BASKETZARAGOZA.NET El conjunto aragonés no pudo superar la eliminatoria de octavos de final frente al Dolomiti Energia Trento pero se despide de la Eurocup con los mejores números en sus tres participaciones en la segunda competición continental. Una tercera experiencia en la que los rojillos han logrado llegar por primera vez a las rondas eliminatorias.
Ha sido un camino lento pero seguro y que finalmente ha dado sus frutos hasta derribar por primera vez el muro que suponía el Last 32 para el CAI Zaragoza. El debut europeo allá por la campaña 2013-2014 se saldó con un meritorio balance de 6 victorias y 4 derrotas en la fase de grupos. Durante sus 10 partidos, el conjunto maño mostró mucha solidez con 80.3 puntos a favor y tan solo concediendo 71.9 a sus oponentes. Sin embargo, en el Last 32, con la creciente competitividad de rivales mucho más recorrido europeo como Besiktas Integral Forex, Lietuvos Rytas y Cedevita, el cuadro aragonés ponía punto final a su primera incursión europea logando dos triunfos en seis partidos y manteniendo sus opciones hasta aquel fatídico último encuentro disputado en el Palacio de los Deportes de Huesca frente a los turcos.
La temporada 2014-2015 deparaba una muy exigente primera fase para el CAI Zaragoza junto a equipos del nivel del Estrasburgo, Brose Baskets, Grissin Bon Reggio Emilia, Paris Levallois y Telekom Baskets Bonn por segundo año. Pese a la igualdad que predominó en el grupo, los rojillos conseguían certificar su pase (5 victorias y 5 derrotas) en la penúltima jornada con la victoria a domicilio frente al semifinalista italiano. Además, los rojillos lo hacían con su mejor promedio de puntos en la competición (83.1 por 74.2 en contra). Dos viejos conocidos, Cedevita y Virtus Roma esperaban en el Last 32 junto al Krasny Oktyabr Volgograd. Dos derrotas seguidas ante el conjunto ruso condicionaban el pase del CAI a los octavos, que tan solo conseguía sumar un triunfo, en casa, frente a los transalpinos.
A la tercera por fin fue la vencida. La campaña 2015-2016 será recordada como la de los octavos de final de la Eurocup para el CAI Zaragoza. Superando la primera fase como segundos de grupo, con el mejor bagaje de su corta experiencia internacional (7 victorias y 3 derrotas), los maños superaron con un Last 32 que certificó el ansiado acceso a octavos de final con 4 victorias en seis encuentros, disparando además sus prestaciones en la parcela ofensiva (80 puntos, +4) y en defensa (75.1 concedidos, -0.6) con respecto a la fase de grupos. Méritos que han permitido soñar tanto al equipo como a su ‘marea roja’ con su debut en unas eliminatorias europeas en la que ha sido el mejor curso continental del CAI Zaragoza
Solidez en casa, impulso como visitante
Sin duda, uno de los factores que más han influido en este gran paso que ha dado el equipo zaragozano ha sido la mejora experimentada a domicilio. A su habitual fortaleza en el pabellón Príncipe Felipe, donde solo ha dejado escapar una victoria en nueve partidos, se ha unido un salto cualitativo en sus salidas. En su primera campaña el CAI Zaragoza fue capaz de doblegar a domicilio al Belfius Mons Hainaut (65-104) en la fase de grupos y al Cedevita Zagreb en el Last 32 (74-77), mientras que en 2015 el único triunfo a domicilio fue el ya mencionado ante Grissin Bon Reggio Emilia (75-87), capital para alcanzar el Last 32. Una cifra superada ya solo con las victorias logradas en Nancy (74-75), Venecia (77-79) y Ulm (81-84) durante la primera fase y a la que añadir la última lograda en Szolnok (70-80) que dio el billete a octavos, donde solo faltó un triunfo más a domicilio para seguir soñando.
Viacheslav 'Slava' Kravtsov, líder taponador
El pívot ucraniano ha finalizado su tercera experiencia en la Eurocup como el máximo taponador de los octavos de final con un promedio de 2.5 por encuentro. Pese a no poner ninguno en el encuentro de ida, el interior del CAI Zaragoza colocó cinco 'gorros' en Trento que le han servido para situarse al frente de la clasificación. Anteriormente, el '55' rojillo ya fue clave en la clasificación del equipo para las eliminatorias, liderando a todos los jugadores de la Eurocup durante el Last 32 con 1.67 tapones por encuentro. De esta forma, el de Odessa cierra el curso continental como uno de los mejores taponadores del continente (1.88), solo por detrás de Kevin Tumba (2.6), Ekpe Udoh (2.36) y Shawn James (2.14).