BASKETZARAGOZA.NET La tercera campaña del alero mallorquín en el CAI Zaragoza ha estado marcada por los contrastes y la superación. Como segundo jugador más veterano en la plantilla rojilla, Pere Tomàs se ha sobrepuesto a un difícil inicio de temporada para convertirse en un fijo dentro de la rotación de Andreu Casadevall.

Con cinco aleros en la plantilla 2015-2016, la presencia en cancha iba a estar muy cara, tal y como reflejaban los tres minutos de media de los tres primeros partidos de competición. Tomàs se quedaba sin jugar las siguientes cinco jornadas, una situación que no mejoraba en Europa, donde solo contaba con 4 minutos de presencia, consumida la primera mitad de la fase de grupos. Sin embargo, con la llegada de Casadevall, el trabajo del ‘19’ se veía recompensado. 3 puntos y 8 rebotes en 17 minutos en el primer partido se convertirían en 10 puntos y 3 rebotes unas jornadas más tarde ante ICL Manresa. Pere encontraba también su sitio en Europa y resultaba clave en la victoria en Ulm que certificaba la clasificación para el Last 32 como segundo de grupo con 10 puntos y 8 rebotes.

Destacando por su carácter e intensidad, Tomàs se había hecho con un sitio cada vez más importante en la rotación. Colaborando en todos los apartados estadísticos, su entrega le llevaba a alcanzar los dobles dígitos en valoración durante varios encuentros. Especialmente importante resultaría su actuación frente al Galatasaray Odeabank y Szolnoki Olaj en la Eurocup. Ante los turcos, el de Llucmajor dinamitaba el choque con 11 puntos, 4 rebotes y 2 asistencias en 15 minutos. Mientras que frente los húngaros, demostraba una vez más su versatilidad con 9 puntos, 2 asistencias y 5 robos que ayudaban al CAI Zaragoza a alcanzar por primera vez los octavos de final.

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Sin embargo, su mejor choque del curso sería el capital triunfo ante Movistar Estudiantes en aras de evitar la zona de descenso. Los rojillos doblegaban con solvencia a los colegiales (81-62), récord de rebotes incluido, con un Pere Tomàs que rozaba un histórico triple-doble (11 puntos, 13 rebotes y 8 asistencias). La temporada tocaba a su fin y la importancia del alero iba a ser mayor ante las lesiones de Joan Sastre, Nate Linhart y Robin Benzing, protagonismo que Tomàs no tuvo problema en asumir para alcanzar el objetivo en una temporada difícil con promedios de 5.3 puntos, 3.3 rebotes y 1.2 asistencias en ACB y 5.8 puntos, 2.3 rebotes y 1.2 asistencias en la Eurocup.